La “doble” celebración de este día –procesión y eucaristía- reviste por un lado un ambiente festivo con la aclamación de la realiza de Cristo “Hosanna en las alturas”; (procesión de ramos), y, por otro, un ambiente de muerte “crucifícalo”, (Liturgia de la Palabra de la Eucaristía).
Los que pasaban ante Jesús crucificado se burlaban de él y riéndose le decían “si eres hijo De Dios ,bájate De la Cruz “.
Jesús contó con la posibilidad de un final violento ,sabía que se exponía si seguía insistiendo en el proyecto del reino De Dios . Era muy difícil ,imposible buscar con tanta radicalidad una vida digna para los pobres sin provocar una reacción de aquellos a los que no les interesaba cambio alguno.
Su modo de vida le arrastraba a la muerte en la cruz ,el no busca la crucifixión nunca quiso el sufrimiento para nadie ,tampoco para él pero no se echa atrás . Seguía anunciando el amor De Dios a los últimos ,seguía ofreciendo “salvación “ a quienes sufren a los excluidos por la sociedad y por la religión ,la actitud salvadora que inspira su vida entera ,inspira también su muerte . La Semana Santa no es folclore ni reclamo turístico ,para los seguidores de Jesús celebrar la pasión y muerte del señor es agradecimiento emocional al amor De Dios ,y es llamada a vivir como Jesús solidarizándonos con los crucificados .
Hoy hemos celebrado la entrada en Jerusalén y el recibimiento de los hebreos.
